PENAS SOBRE 3 AÑOS Y UN DÍA POR FALSIFICAR PASES DIARIOS

Penas que comienzan en los tres años y un día arriesgan quienes porten permisos falsos.

Un considerable aumento de permisos falsificados se ha logrado detectar en las ciudades de Curicó, Talca y Linares. Se trata de las autorizaciones diarios que se obtienen a través de la aplicación Comisara Virtual y que han sido modificados por quienes buscan transgredir las normas sanitarias ante la pandemia y la ley en torno a “poner en riesgo la salud pública por infracción de las reglas higiénicas de salubridad debidamente publicadas por la autoridad”,  tal como lo señala el artículo 318 del Código Penal.

Sobre este delito el Fiscal Regional del Maule Julio Contardo,  señaló que “hemos sorprendido en el último tiempo, a través de los controles en las comunas que están en fase uno, precisamente que los permisos que entrega Carabineros han sido falsificado. En este contexto se da la situación de un delito que es el uso malicioso de instrumento público, asociado además – como las personas no cuentan con el permiso – con el artículo 318. De tal manera que existe un concurso de delitos que los afecta con una punibilidad importante ya que existe una sanción probable que excede a los tres años y un día de presidio. Por ello hemos dado las instrucciones en torno al levantamiento de esta información, fundamentalmente de los medios de prueba y así accionar en contra los responsables de este delito.  Y como ha sido la tónica, todos deben responder de la responsabilidad penal que les cabe en atención a las conductas que realizan y en este caso de un delito de gravedad que es la falsificación de la fe pública que constituyen estos instrumentos. Indudablemente que es una conducta absolutamente deleznable y que nos tiene en esta condición actual. Personas que no cuenta  con los permisos respectivos incurren en este delito utilizando los instrumentos falsificados”.

En cada uno de los controles realizados por Carabineros tanto a automovilistas como a peatones, se ha intensificado el uso de los equipos digitales que permiten leer el código QR que se imprimen en los permisos diarios. Aquello ha permitido establecer aún con mayor claridad y exactitud si se porta un documento falsificado, correspondiendo entonces la detención del imputado.